Desde la Asociación Vecinal del Casco Norte de Sevilla “La Revuelta” hemos participado en las consultas previas que ha realizado la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente para “la redacción del instrumento normativo necesario para que, por razones de imperioso interés general, el Ayuntamiento de Sevilla establezca limitaciones proporcionadas en lo que respecta al número máximo de viviendas de uso turístico”.
Insistimos en la necesidad de que el gobierno municipal explore al máximo sus competencias para garantizar el derecho a la vivienda y frenar la especulación en nuestro barrios, regulando y limitando los usos turísticos en zonas saturadas como claramente es el Casco Antiguo de la ciudad.
Lamentamos que el alcalde vuelva a decir que no puede limitar ni restringir las viviendas turísticas, pese a prometerlo en campaña electoral o pese a que otros Ayuntamientos de nuestro país lo han hecho aprobando diversos instrumentos urbanísticos que regulan y limitan el uso turístico de las viviendas.
Las propuestas registradas por nuestra Asociación Vecinal son las siguientes (descargar en PDF):
- Establecer una moratoria de viviendas con uso turístico hasta la aprobación definitiva del instrumento normativo que pretende el Ayuntamiento de Sevilla.
- Modificación del PGOU (artículo 6.5.19. de las Normas Urbanísticas) para incluir las viviendas de uso turístico dentro del uso Servicios Terciarios, uso pormenorizado hospedaje, permitiendo su uso sólo por debajo de plantas con viviendas residenciales y, si están en la misma planta o en plantas superiores, entonces sólo se permitirían si tienen acceso independiente.
- Requerir una licencia de cambio de uso presentando un proyecto de obras y que no baste con una declaración responsable.
- Imposición de límites cuantitativos al uso turístico para evitar que en zonas turísticamente saturadas continúe aumentando la presión turística. La presión se calcularía en función de la proporción entre el uso turístico y el uso residencial y se establecerían límites según zonas. En dicha limitación habría que incluir todos los tipos de alojamiento turístico, no sólo las viviendas de uso turístico sino también apartamentos turísticos y diferentes establecimientos hoteleros, de lo contrario se estaría discriminando a unos frente a otros.
- Prohibición de la instalación de candados/cerraduras de viviendas de uso turístico en las fachadas del municipio o, en su defecto, obligatoriedad de licencia municipal para ello y aplicación de una tasa por uso privativo del espacio público.
- Fortalecer la labor de inspección y endurecer el régimen sancionador para considerar uso urbanístico clandestino y/o actividad no comunicada aquellas actuaciones que no cuenten con los correspondientes permisos, incluyéndose la imposibilidad de continuar con el ejercicio de la actividad de vivienda turística.
- Requerir a las plataformas digitales la lista de viviendas en el municipio y comparar con los datos oficiales del Registro de Turismo Andaluz.
- Aplicación de los diferentes impuestos y tasas teniendo en cuenta que las viviendas de uso turístico no tienen un uso residencial, de esa forma pagarían en “igualdad de condiciones” con inmuebles que ejercen una actividad comercial (tiendas, hoteles…). En definitiva, se trataría de considerar uso comercial y no residencial a la hora de calcular todos los tributos municipales.
- Instar a la Junta de Andalucía a la creación, regulación y aplicación de una tasa turística.
- Crear campañas de colaboración ciudadana (destinada al vecindario y turistas) para detectar viviendas turísticas ilegales y campañas de información: efectos colaterales, derechos y deberes...
- Establecer un sistema de evaluación en base a indicadores, que permitan obtener información sobre la incidencia de estas medidas sobre los aspectos que queremos proteger: el derecho a vivienda y la calidad ambiental y del entorno urbano, en base a lo cual realizar los ajustes pertinentes.